sábado, 24 de mayo de 2008

Mimanicomiotumanicomio

Un amigo dijo anoche, casi como una sentencia: "Si no lo sacás para afuera, te va a explotar el orto". Darse cuenta y terminar con el encierro, a todo nivel. No al encierro, un grito. Pero también un susurro en el adentro de cada uno. Qué bueno tener esa oreja, que no se compra, para saltar los muros. Oliverio Girondo, algo así como un padrino de este blog, escribió en "Invitación al vómito":

Cúbrete el rostro
y llora.
Vomita.
¡Si! Vomita,
largos trozos de vidrio,
amargos alfileres,
turbios gritos de espanto,
vocablos carcomidos;
sobre esta nauseabunda iniquidad sin cauce,
y esta castrada y fétida sumisión cultivada
en flatulentos caldos de terror y de ayuno.

Cúbrete el rostro
y llora...
pero no te contengas.
Vomita.
¡Si!
Vomita,
ante esta paranoica estupidez macabra,
sobre este delirante cretinismo estentóreo
y esta senil orgía de egoísmo prostático:
lacios coágulos de asco,
macerada impotencia,
rancios jugos de hastío,
trozos de amarga espera...
horas entrecortadas por relinchos de angustia.

6 comentarios:

Margot dijo...

vomitar es un ejercicio, y a veces hasta una obligación. yo creo que el padrino de este blog es el vómito, y girondo el medio por el cual el vómito llega a vos. a uno. a todos. vomitar, a veces, es una obligación.

FdA dijo...

será por eso que después de vomitar uno se se siente aliviado?

Margot dijo...

y si. aunque a veces las consecuencias del vómito no sean del todo lindas. pero a afrontarlas con la cabeza en alto! a hacerse cargo del vómito! (qué escatológicos estamos!)

Gordon dijo...

Uno que ha vomitado sabe que es un recurso efectivo. Aunque es dificil de asumir, generalmente el vómito se impone sobre la situación. Pero como el bueno de Jarret da a entender, hay que estar predispuesto al vómito. Por más desagradable que resulte la idea, llegamos a un punto en el que es necesario.
Y que decir de don Oliverio... escatologicamente brillante.

FdA dijo...

y aunque no viene al caso, o sí, comparto una frase de Oliverio que usaremos probablemente para el cierre de comiomaní este sábado: "La costumbre nos teje una telaraña en las pupilas"

Margot dijo...

y por eso, "la rebelión consiste en mirar una rosa hasta pulverizarse los ojos". oliverio y alejandra, problema y solución. y todos contentos!