miércoles, 13 de agosto de 2008

Cadete de mí mismo

Cuando trabajaba de cadete, en un hediondo estudio contable en la zona de Puente Pacífico, alguna vez pensé: ¡Qué groso los tipos que tienen un pibe que les lleva y trae las cosas! No me había dado cuenta, pero yo ya soy así de groso.

- Hola, habla Jarret, del diario Garsopa. (... bla, bla, bla ...) ¿Podrían darme una copia de ese material?

- Sí, cómo no señor. Está a su disposición.

A las pocas horas, voy en busca de los papeles. Llego:

- Qué tal. Venía a buscar unos papeles. Estaban a nombre de Jarret, del diario Garsopa.

- A ver. Dame un segundo.

(La secretaria habla por teléfono)

- Acá vino un chico a buscar unos papeles para Jarret, del diario Garsopa. ¿Están? (...) Bueno, está bien.

(Me habla a mí)

- Ya te lo damos.

5 comentarios:

Margot dijo...

es que con esa carita preciosa de niño que tenés, a quién se le puede ocurrir que sos ése periodista influyente de los medios?

Harnos dijo...

margot, carita de nene, periodista influyente ¡ANDAAA!

Mercadito de barrio dijo...

un capo capo.

FdA dijo...

ahora que lo pienso, cuando era cadete tenía un solo trabajo, ahora que soy capo capo, tengo 4 y de a ratos 5, capo ¿capo?

Margot dijo...

sí, jarret. capo capo.